IRRESPONSABLES

Ushuaia - La irresponsabilidad con la que manejan la alcaidía que funciona en el piso superior de la Jefatura de Policía, en la ciudad de Ushuaia, deja entrever que el sistema penitenciario provincial está en crisis, los principales responsables son el Secretario de Seguridad de la Provincia Javier Eposto y el Director Provincial Inspector General José Claudio Canovas. 

Días atrás un violador reincidente abusó sexualmente a una menor de 9 años en las instalaciones de la alcaidía, en complicidad y con la imprudencia de los funcionarios penitenciarios que permitieron que eso sucediera. Como si esto fuera poco el agresor tenía en su celda un teléfono celular con el que amenazaba permanentemente a su pareja, de esta situación no se encontraban ajenos el personal penitenciario.

Al respecto el funcionario provincial Javier Eposto expresó que se enteró del hecho por la madre, momentos en el que salía de la alcaldía y la nena le contó lo que había sucedido. “Yo mismo la acerqué a la Comisaría de la Mujer para hacer la denuncia y fui a la Penitenciaría para salvaguardar las filmaciones, y dar cuenta al oficial del servicio de que el detenido indudablemente tenía un celular dentro de la habitación porque la seguía amenazando a la madre”.

“Pedí al servicio penitenciario que le haga una requisa y que sea trasladado a la ciudad de Río Grande. Luego puse todo el material a disposición del Juez donde inició una causa y hoy está procesado un penitenciario que estaba a cargo de los sistemas de control, y a esta persona se le ejecuta la pena que recae en la anterior y en la actual” indicó.

Eposto, dio a conocer además, que se enteró del aberrante hecho apenas asumió como Secretario de Seguridad, afirmando que “me quedé con las filmaciones donde se veía que la nena entraba al calabozo, y al otro día me comuniqué con la justicia y puse esto a disposición”.

Según el secretario de seguridad, era una conocida de la madre, quien tenía a su pareja presa en la cárcel; la que estaba a cargo de llevar a la nena al Servicio para que busque a su padre en el marco de las visitas, y donde ocurrió el abuso.

“Creo que hubo un alto grado de desatención e irresponsabilidad en la gente que tenía que garantizar que a esa nena no pase lo que pasó. Yo me hice cargo de mis errores y he hablado con personal del servicio penitenciario porque me dolió. Fue lo primero que me pasó cuando asumí y no podía creer el grado de falta de vocación” expresó.

“Tenemos un tipo preso por violación, con el grado de reincidencia, la violación había sido intrafamiliar y yo no entendía en mi cabeza como a nadie se le prendió la vela en la cabeza para decir `a éste tengámoslo cerca´. Ahí está mi gran enojo con el personal. Fuimos hablando y empezamos a trabajar en la capacitación. Tarde, porque me hubiera gustado que esto no pasara” expresó Eposto.

Aunque se lamente por la ineptitud del personal a su cargo Eposto nunca le podrá devolver la inocencia perdida por el abuso sexual ultrajante que sufrió y fue víctima una niña de tan solo 9 años de edad, en instalaciones de la provincia. Donde aún no encontraron un responsable administrativo de tal situación y la justicia no toma cartas en el asunto.